La edición de la Champions League 2004-2005, enfrentaría en la final en Estambul al Liverpool y al Milán.
El árbitro pitaba el arranque de partido y ya en el primer minuto, el equipo italiano se adelantaba en el marcador con un gol de Maldini. El Milán tenía el control del partido y en el minuto 39' hacía el segundo, obra de Crespo. Antes del descanso, Crespo marcaba el segundo de su cuenta particular haciendo así el 3-0 a favor del Milán. Los jugadores se marchaban al túnel de vestuarios y la final parecía ya definida, pero iba a ser mucho distinto.
El Liverppol salía dispuesto a remontar el encuentro al equipo de Ancelotti y no les iba a costar, en el minuto 54', el capitán Gerrard recortaba distancias y tan solo dos minutos después Smicer dejaba a los ingleses a un gol de empatar la final. No iban a tardar y un penalti que paraba Dida, serie remachado por Xabi Alonso en el minuto 60'. La final se volvió loca en unos minutos y más tarde, Dudek haría una parada con la planta del pie espectacular.
En la prórroga no hubo goles y el partido se marchaba a los penaltis. Comenzaría tirando el Milán, en los pies de Serginho que mandaba el balón a las nubes, en cambio Harmann adelantaba al Liverpool. Dudek adivinaba las intenciones de Pirlo y detenía el penalti de Pirlo. Cissé aumentaba la ventaja para el Liverpool y Tomasson anotaba el primer penalti para los italianos. Riise falla el tercer tiro libre y Kaká lo aprovechaba y anotaba desde los 11 metros. Smicer ponía en ventaja al Liverpool y Shevchenko sería el encargado de tirar el quinto penalti de los "rossoneri". Dudek una vez más, detenía el penalti y hacía campeón a los ingleses.
Así hacía una de las mayores remontadas en la historia de la Champions League y lo más importante, en una final.
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